La provincia de Buenos Aires anunció hoy que a partir del próximo año se eliminará el sistema de repitencia tradicional en la escuela secundaria para pasar a uno que estará regido por la aprobación de materias.
Así lo explicó el director general de Cultura y Educación bonaerense, Alberto Sileoni, quien detalló que en el nuevo esquema la importancia estará puesta en la acreditación de asignaturas aprobadas y no en los años.
De acuerdo al sistema que se implementará en 2025, no se obligará al alumno a recursar todas las materias del año -en caso de no aprobar el mínimo necesario de ese período-, sino solo las que haya desaprobado.
Las materias no aprobadas -hasta cuatro- pasarán a un curso acelerado entre diciembre y marzo para ver si se revierte la situación. En caso de tener más de cuatro sin aprobar en un año, esas que excedan el número deberán ser recursadas en el siguiente período lectivo.
De esta manera ya no se repetirá un año entero, sino que se hará una intensificación de la enseñanza al principio y final de los dos cuatrimestres en cada materia desaprobada, siempre y cuando sean hasta cuatro. En caso de que las materias pendientes de aprobación sean cinco o más, recién ahí las que excedan el límite se deberán recursar.
Los cambios en la escuela secundaria bonaerense para el 2025, incluyen modificaciones en los contenidos curriculares, la convocatoria a concursos de cargos jerárquicos, un nuevo régimen académico y la concentración horaria de los diferentes turnos.
Las medidas que entrarán en vigencia desde el año que viene y se dividen en cuatro ejes, fueron anunciadas este jueves por Sileoni, quien destacó que los cambios «fueron aprobados de manera unánime» por el Consejo General de Educación de la provincia, integrado por tres representantes del oficialismo, tres de Juntos por el Cambio y cuatro representantes gremiales.
Asimismo, precisó que la evaluación será por nota numérica en dos cuatrimestres, en los cuales se deberá aprobar con 7 o más en cada uno de los segmentos. Al respecto, Sileoni rechazó la idea de que el nuevo sistema ofrezca más facilidades y sostuvo que «el derecho es a estar en la escuela, no a aprobar» indicando que «para aprobar se necesita esfuerzo».
Más posibilidades de realizar pasantías
El funcionario bonaerense aseguró que con las nuevas disposiciones «queremos tender a una escuela secundaria que acompañe más a los pibes y pibas», por lo que aseguró que «va a haber un equipo de acompañamiento a la trayectoria educativa», haciendo referencia a la conformación de un «Equipo de Definición de las Trayectorias Educativas (EDTE)».
El seguimiento de los estudiantes también se hará en la transición de sexto de primaria al ingreso de la secundaria y del último año de los estudios en el nivel medio a la continuidad de la formación en el ámbito universitario o terciario. Al respecto se incorporarán diferentes propuestas formativas, entre las que habrá más posibilidades de realizar pasantías en organizaciones comunitarias y ámbitos de estudio superior.
El nuevo enfoque de la educación secundaria también permitirá que cada escuela organice la enseñanza de acuerdo a su realidad institucional. A su vez, Sileoni precisó que con el renovado régimen habrá «más tiempo en la escuela y más enseñanza», por lo que precisó que «vamos a hacer una inversión en módulos» señalando que se trata de «inversión educativa en un contexto de adversidad presupuestaria».
De esta manera, se avanzará en la evaluación y modificación de los diseños curriculares vigentes, en relación a la cantidad de materias y contenidos tras 17 años de vigencia de los actuales.
Además, se hará un llamado a concurso de titularización de cargos jerárquicos (director, vicedirector). En este sentido, Sileoni aseguró que esperan 10.000 aspirantes para cubrir 3.400 cargos de directores y vices que actualmente están provisorios. Está situación genera el movimiento constante de los directivos entre los establecimientos, lo que según la mirada del titular de Educación «conspira con la calidad educativa».
Las modificaciones enmarcadas en la iniciativa denominada «Es más secundaria», se basaron en «las propuestas planteadas por docentes, estudiantes, directoras y directores de escuelas».
Sileoni precisó que una encuesta con 12.000 docentes del nivel medio durante el año pasado arrojó que «el 92% creía que había que hacer un cambio».
Desde la cartera educativa, argumentaron los cambios en el secundario señalando que «es una respuesta a la demanda sobre la necesidad de transformar la escuela secundaria. Recoge las propuestas planteadas por docentes, estudiantes, directoras y directores de escuelas. Recupera buenas experiencias ya implementadas».
Sileoni destacó las reformas impulsadas y aseguró que «ratificamos que elegimos un camino en la convicción profunda de que la escuela secundaria no estaba cumpliendo con la tarea que tenía que cumplir».