En la jornada de ayer, taxistas y remiseros marcharon desde distintos puntos de la ciudad hacia el Concejo Deliberante en protesta por la discordia de las Apps y los autos particulares. El Sindicato de Peones de Taxis de la ciudad de Córdoba fue el encargado de organizar la marcha de protesta desde la Terminal de Ómnibus para reclamar contra las aplicaciones de viajes con chofer.
La movilización se inició a partir de las 10 y provocó inconvenientes en la prestación de servicio en ese lugar. El titular del gremio, Carlos Reviglio, sostuvo que consideran que el funcionamiento de aplicaciones como Uber, Cabify y Didi ponen en riesgo al servicio de taxis. “Estas aplicaciones han diezmado exponencialmente nuestros ingresos. Está en riesgo el servicio de taxis y remises en la ciudad de Córdoba”, indicó. Además, cuestionó sobre la “enorme publicidad de una actividad que no está autorizada ni regulada por la Municipalidad”.
Reviglio ahondó sobre la polémica y aseguró: “La gente no elige aplicaciones, elige el precio de las aplicaciones. Eso es algo que determina la competencia desleal sobre nosotros”. Al mismo tiempo, durante la marcha hubo cruces con colegas que no adhirieron a la protesta y un damnificado acusado de ser un “chofer particular” a quien le rompieron partes del auto y fue agredido por algunos protestantes.
El hombre, quiencirculaba con su familia, fue confundido y de inmediato un grupo de taxistas emprendieron golpes contra su auto. “Estaba pasando por ahi de la nada me empezaron a pegar en el auto, no insulté a nadie. Me metieron un bollo, y me bajo del auto por qué me hiciste esto, me agarraron del cuello”, declaró el vecino.