La cámara empresaria que nuclea a los dueños de casi 700 estaciones de servicio de Córdoba impugnó una licitación provincial que busca instalar nueve “áreas de servicios” en las Rutas de Acceso a Córdoba (RAC), a la vez que reclamó la suspensión de la apertura de ofertas prevista para el próximo martes 1º de noviembre.
La convocatoria se abrió en julio pasado y hoy está a cargo de Caminos de las Sierras, la empresa concesionaria en manos del gobierno provincial que administra la red de rutas desde febrero de 2010, cuando se desvinculó de la concesión iniciada en 1994 al grupo italiano Impregilo.
Ahora, la Provincia reactivó la iniciativa y lanzó un pliego para regular el llamado a licitación pública para el otorgamiento de la explotación de áreas de servicios. La RAC está integrada por 9 rutas: la nacional 20/38, ruta provincial 5, ruta nacional 36, ruta nacional 9 sur, autopista Pilar Córdoba, ruta nacional 19, ruta nacional 9 norte, ruta provincial E-53 y ruta provincial E-55, más la avenida de Circunvalación de nuestra ciudad.
Según el pliego original de 64 páginas, un solo contratista tendrá el derecho a la explotación de las nueve áreas llave en mano hasta febrero de 2039. El organismo de control será el Ente Regulador de los Servicios Públicos (Ersep), aunque las inspecciones quedarán bajo responsabilidad de Caminos de las Sierras.
La polémica con el resto de los operadores de estaciones de servicio de Córdoba surgió en principio por la falta de consulta. Pero luego de reuniones entre funcionarios a cargo de la licitación y los empresarios locales, que en su mayoría son pymes familiares, aparecieron las diferencias. En el medio, Caminos de la Sierras emitió varias circulares con más de una decena de cambios al pliego original.
Ante la falta de respuestas, el 18 de octubre pasado la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro de la República (Fecac) presentó una impugnación formal al trámite. La entidad manifestó en esa presentación su rechazo y oposición, ya que la instalación de las áreas ocasionará un “perjuicio económico invaluable para las estaciones de servicio que hoy existen en la zona”, reveló en un informe el diario Ámbito Financiero.
En la impugnación, los estacioneros de Córdoba objetaron la “intromisión” del gobierno provincial en un “mercado equilibrado y guiado, hasta hoy, por la oferta y la demanda” y dejaron en evidencia las “innumerables irregularidades” que presenta el pliego, demostrando que “varias de sus cláusulas son arbitrarias y permiten la discrecionalidad por parte de la autoridad concedente al momento de seleccionar la mejor oferta”.
En primer lugar, aseguran que a las “áreas de servicio” les permitirán la venta de combustibles líquidos, GNC, estacionamiento, venta de comida y lubricentro, y que esta medida generará una “competencia” con las estaciones que operan en la actualidad, y ya se encuentran funcionando. “Estos 9 sectores tienen la demanda cubierta”, afirmaron desde la entidad que lidera Gabriel Bornoroni, firmante de la impugnación. “Hoy la demanda de combustibles en la provincia está totalmente satisfecha con las estaciones existentes”, agregaron en el texto.
Pero además, objetaron que el pliego “deja abierta la posibilidad para que se presenten empresas que no sean del rubro y que además no sean de Córdoba, ya que al denominarlas erradamente áreas de servicio cualquier persona del sector comercio podría participar de la licitación”. Uno de los ejemplos que expusieron es la contradicción que surge con los antecedentes exigidos para los oferentes: “Acreditar la propiedad y/o explotación comercial de una estación de bandera como mínimo”. “¿Y/o qué significa?”, se preguntan los impugnadores.
Por último, desde Fecac alertaron por la posibilidad de “discrecionalidad” a la hora de elegir al mejor oferente, ya que la selección que se propone es una práctica “poco transparente y subjetiva”. En este sentido, indicaron que el pliego deja a discreción de Caminos de las Sierras, la elección del oferente por cuanto dice que será ganador el mejor proyecto.
Ante esta situación y teniendo en cuenta que las estaciones de servicio -no solo de Córdoba sino de todo el país- todavía conviven con dificultades por el atraso de precios, un punto de equilibrio para el negocio que no llega, la alta carga impositiva, los elevados porcentajes paritarios a cubrir hasta fin de año y las desventajas de cobrar con tarjetas de crédito, entre otras problemáticas, los estacioneros de Córdoba solicitaron una reunión con el gobernador Juan Schiaretti. “Manifestamos esta oposición a la licitación y que queremos dialogar en una audiencia con el gobernador”, remarcaron.