A una mujer oriunda de Israel le tuvieron que retirar un juguete sexual de su vejiga luego de insertarlo en el agujero equivocado accidentalmente. La israelí de 29 años llegó a la unidad de emergencia alegando incomodidad al orinar y dolor abdominal: admitió haberlo introducido en su uretra (el tubo que permite que la orina salga del cuerpo) durante el acto sexual por error.
A pesar de haber estado “varias horas” intentando remover del cuerpo el objeto, que tiene casi 10 centímetros de largo y 2,5 de ancho, no pudo sacarlo. Los doctores del Shaare Zedek Medical Center de Jerusalem fueron los encargados de asistir a la mujer, cuya identidad es anónima, y afirmaron que es el “objeto más ancho” que fue removido de esta manera ya que el anterior registro fue de 2,4 centímetros.
La mujer tuvo que pasar por un ultrasonido y rayos X, los cuales demostraron que el objeto estaba atorado horizontalmente en su vejiga. Los médicos le dieron a la mujer, quien se había introducido el juguete por “gratificación sexual”, antibióticos mediante goteo intravenoso y le realizaron una cistoscopía -un procedimiento en el que un tubo fino y largo con una cámara en uno de los extremos se inserta por la uretra- para intentar removerlo.
Mientras la paciente se encontraba anestesiada, los médicos pasaron una pinza por el tubo para tirar el juguete de su vejiga mediante la uretra. La mujer fue dada de alta el mismo día luego de que los doctores confirmaran que podía pasar orina normalmente.
El equipo médico escribió en un sitio web de la disciplina que los objetos externos en el tracto urinario, como la uretra y la vejiga, son “bastante raros”, y son producto de la autoinserción, exploración o desórdenes mentales. Además, indicaron que se han extraído una gran variedad de objetos del tracto urinario.
