Rusia afirmó ayer haber repelido un ataque con drones navales contra buques patrulleros rusos en el mar Negro, horas después de denunciar otro bombardeo en Moscú de aviones no tripulados que alcanzó un edificio que alberga a varios organismos oficiales y que ya había resultado dañado por otro dron dos días atrás, de los que acusó a Ucrania.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que derribó dos drones a las afueras de Moscú en horas de la madrugada y que inhabilitó otro que se estrelló contra un rascacielos en el distrito comercial de la capital rusa, dañando la fachada del edificio, donde están las sedes de varios ministerios.
En tanto, Estados Unidos asumió ayer la presidencia rotativa del Consejo de Seguridad de la ONU y anticipó que la agenda se centrará “en la seguridad alimentaria, la agresión rusa contra Ucrania y el respeto de los derechos humanos en el mundo”. Estas “serán las principales prioridades”, indicó el vocero del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.