Un hombre estadounidense de 68 años que fue diagnosticado con leucemia mientras vivía con VIH logró la remisión de ambas patologías potencialmente mortales a través de un novedoso tratamiento que consideraron «alentador» para avanzar en posibles curas.
Paul Edmonds, oriundo del estado de California, en Estados Unidos, se convirtió en la quinta persona en el mundo en lograr la remisión de una leucemia mielógena aguda y de VIH luego de recibir un trasplante de células madre, según un comunicado de prensa de City of Hope, el instituto nacional contra el cáncer que le brindó atención médica.
El paciente recibió un tratamiento con células madre con «una rara mutación genética», la homocigótica CCR5 Delta 32, que hace que las personas que la padecen sean resistentes a contraer VIH.
A sus 68 años, Edmonds se convirtió en la persona de mayor edad de las cinco que lograron la remisión de ambas patologías, y era quien había tenido VIH durante más tiempo, superando los 30 años desde su diagnóstico.
Su caso fue explicado en una investigación recientemente publicada en la revista médica New England Journal of Medicine, donde se demuestra que las personas adultas mayores con cánceres de sangre que reciben quimioterapia de intensidad reducida antes de un trasplante de células madre con células de donante resistentes al VIH «pueden curarse de la infección por VIH», precisó el City of Hope.
Edmonds recibió un trasplante en esta institución estadounidense el 6 de febrero de 2019 y actualmente está curado de la leucemia.
Además, dejó de tomar terapias antirretrovirales para el VIH hace casi tres años y «será considerado curado del VIH después de haber dejado de tomar antirretrovirales durante cinco años».
«El caso demuestra que es posible lograr la remisión del VIH incluso a una edad avanzada y después de vivir con el VIH durante muchos años», dijo Jana Dickter, profesora clínica de la División de Enfermedades Infecciosas de City of Hope, quien dirigió el estudio.
“A medida que las personas con VIH sigan viviendo más tiempo, habrá más oportunidades de tratamientos personalizados para sus cánceres de sangre”, agregó la experta.
En un vídeo de YouTube, Edmonds expresó que decidió contar su experiencia porque espera que le “dé esperanza a las personas con VIH” y contó que, cuando fue diagnosticado con VIH en 1988, sintió «como si le hubieran condenado a muerte».
“Quiero recordar a todos los que perdimos”, añadió el hombre.
En agosto de 2018, a Edmonds le diagnosticaron síndrome mielodisplásico, que finalmente se convirtió en leucemia mieloide aguda.
Bajo el cuidado del hematólogo de City of Hope Ahmed Aribi, Edmonds recibió tres terapias diferentes para lograr la remisión. Los pacientes trasplantados primero deben lograr la remisión del cáncer, lo que a menudo requiere quimioterapia intensa para erradicar las células cancerosas y luego administrar las células madre sanas del donante.
Administrar quimioterapia a un paciente como Edmonds, que también estaba tomando terapia antirretroviral contra el VIH, puede ser «un desafío porque la quimioterapia puede disminuir temporalmente el sistema inmunológico del paciente».
De ahí la decisión de los médicos estadounidenses de adoptar con Edmonds tratamientos de quimioterapia de intensidad reducida, una de las claves por las que el paciente pudo haber tolerado «tan bien» el trasplante que resultó exitoso.
«No nos detendremos ahí. Nuestros investigadores están trabajando en la creación de células madre que tengan la mutación genética que las hace naturalmente resistentes al VIH, entre otras iniciativas de investigación”, anticipó Stephen Forman, director del Instituto de Investigación de Enfermedades Hematológicas Malignas de City of Hope, que es uno de los centros de trasplantes de mayor volumen de Estados Unidos.