LONDRES.- El jefe del servicio de Salud de Estocolmo, capital del país europeo, pidió en efecto ayer ayuda al gobierno central porque los hospitales de la ciudad se llenan de pacientes con coronavirus en medio de la nueva ola de infecciones. Bjorn Eriksson, director de atención médica para Estocolmo, dijo que las unidades de cuidados intensivos de la región están casi llenas y le pidió al gobierno que enviara enfermeras y personal hospitalario adicionales para lidiar con la crisis. Necesitamos ayuda”, dijo en una dramática conferencia de prensa, donde señaló que 83 pacientes estaban en camas de cuidados intensivos, prácticamente la totalidad del sistema.
A su vez, en Alemania, el presidente del instituto de vigilancia epidemiológica Robert Koch (RKI), Lothar Wieler, aseveró que el aumento de los contagios es preocupante”, un día después de que informara un récord diario de 590 muertes. La situación sigue siendo muy grave (…) empeoró desde la semana pasada”, subrayó Wieler, quien al igual que la canciller Angela Merkel advirtió que están considerando” nuevas medidas de restricción social para las fiestas de fin de año. No es el único país que se dispone a restringir los festejos: Francia anunció ayer la imposición de un toque de queda reforzado para el 31 de diciembre desde las 8 de la noche, medida que se aplicará diariamente desde el martes próximo. Si bien el 24 de diciembre las reuniones y desplazamientos estarán autorizados con un límite de seis adultos, esa posibilidad quedará prohibida para el 31 de diciembre.
