En un panorama donde crece la preocupación por la nueva cepa Ómicron, trascendió que el pasado viernes funcionarias argentinas habrían habilitado el ingreso de un crucero proveniente de Cabo Verde y con pasajero con COVID positivo a bordo, por pensar que quedaba en Asia y no en África.
En este sentido, autoridades sanitarias desmintieron la confusión, pero sí admitieron el arribo e incluso el desembarco de pasajeros no testeados. De esta forma, el crucero encalló en la terminal Benito Quinquela Martín aun cuando tenía un pasajero positivo de COVID-19 aislado a bordo junto a sus contactos estrechos y llegaba desde África, epicentro de la nueva variante Ómicron.
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Pero pasado un tiempo, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, aseguró que todo esto se trató de noticias falsas.
La información difundida sobre el crucero “Hamburg” es falsa. El buque dio aviso de un caso positivo, se programó un operativo y se realizaron más de 300 PCR en 24 horas.
Todas fueron negativas incluyendo la del caso, quien continúa aislado junto a sus contactos estrechos.
— Carla Vizzotti (@carlavizzotti) November 29, 2021
En la misma red, lamentó que desde el portal de noticias Infobae, donde se difundió la información, nadie hubiese consultado al Ministerio de Salud para evitar la difusión de «información incorrecta».
«Nadie nos consultó antes de la publicación de la nota, lo cual hubiese evitado que se difundiera información incorrecta. No nos vamos a cansar de recomendar que chequeen con fuentes oficiales y confiables, y de esta forma aportar calma en esta situación tan particular», manifestó Vizzotti.
Pero este mismo lunes, la directora de Habilitación, Fiscalización y Sanidad de Fronteras, Claudia Madies, admitió todo lo anterior, excepto la existencia de esa confusión entre las dos funcionarias, al menos en términos oficiales (es decir, no descartó que eso haya sucedido en una conversación privada).
Madies en declaraciones a la “Radio con Vos” contó que, en primer lugar, el barco había informado del caso positivo y de los aislamientos, por lo cual su viaje venía siendo especialmente monitoreado. Desmintió que no se supiera dónde quedaba Cabo Verde (frente a las costas de Senegal, en el Atlántico), pero aclaró que al momento del arribo no existía la cuarentena obligatoria para viajeros que hayan estado en África durante los 14 días previos. Esa medida se impuso este lunes 29 de noviembre.
Pero el viernes sí estaba previsto un dispositivo especial que se activó a medias. Desde luego, los contagiados quedaron a bordo, terminando su cuarentena (ya tenían casi cumplidos los 10 días), pero los casi 300 pasajeros y tripulantes debieron ser testeados a bordo antes del descenso, y eso sostienen que no ocurrió de manera inmediata.
Los pasajeros y tripulantes llegaron a descender a la terminal a retirar el equipaje y se disponían a salir cuando fueron retenidos por personal de sanidad y de la empresa, y obligados a regresar al barco. Una vez allí fueron testeados y, tras conocerse los negativos, pudieron descender nuevamente y circular por Buenos Aires, ciudad que se encuentra recorriendo al momento de la publicación de este artículo.
Asimismo, Madies aseguró que las pruebas realizadas al pasajero contagiado fueron remitidas como corresponde al Instituto Malbrán para su secuenciación, pero todavía no se sabe si se trata efectivamente de la nueva cepa.
Concluyendo, la funcionaria insistió en que el ingreso del MS Hamburg al puerto fue permitido porque aún hoy no están prohibidas las llegadas y que sus pasajeros están haciendo turismo en tierra porque su arribo fue anterior a la disposición de la actual cuarentena.