La entrada en vigencia de la Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva, con las restricciones a la compra y tenencia de dólares ya conocidas, desde el cepo hasta el impuesto del 30%, obligan a los clubes de fútbol a ingeniárselas para competir con los mercados externos, ya sea para retener a las estrellas o para incorporar refuerzos de mediana calidad.
De cualquier manera, no son pocos los que hablan del nuevo dólar fútbol”, que es el que se fija en los contratos como tope para el pago de los vínculos. El caso más pragmático es el de Daryo Moreno. El colombiano llegó a Talleres hace poco menos de un año, cuando la moneda norteamericana rondaba los 20 pesos. Corridas bancarias mediante, mantener el vínculo se tornó demasiado oneroso para la T, que sin embargo, logró mantenerlo entre sus filas aunque no se sabe a ciencia cierta cuál es el dólar Dayro”.
En los clubes grandes, en cambio, la situación se torna compleja, ya que son varios los jugadores que pedirán una actualización del contrato, ya que la cotización del dólar quedó atrasada. Dadas las escasas posibilidades económicas de la mayoría de los clubes, salvo los grandes, para retener a jugadores top”, la brecha entre los más poderosos y los más chicos se agrandará a partir del éxodo hacia mercados más atractivos económicamente (que pagan en dólares) como los países limítrofes, México, Asia o Estados Unidos.
Dadas las escasas posibilidades económicas de la mayoría de los clubes, salvo los grandes, para retener a jugadores «top», la brecha entre los más poderosos y los más chicos se agrandará
Otra de las medidas que el Gobierno tomó fue ratificar el cepo cambiario impuesto por Mauricio Macri, que incluye la obligación de liquidar divisas en menos de una semana. De esta manera, los clubes no pueden comprar los dólares que necesitan en el mercado oficial y además están obligados a vender al precio oficial todos los dólares que le ingresan (producto de premios y ventas en el exterior) en un plazo no mayor a 5 días, tal como lo dispuso en septiembre el Banco Central.
Así, por obra y gracia de las cotizaciones e impuestos, los clubes pierden” al entrar en la bicicleta negativa. Para morigerar esta medida, algunas instituciones para evitar liquidar los dólares empezaron a adelantar pagos de deuda a otros clubes, tal como permite la normativa.
Con este clima habrá que esperar cómo se mueve el mercador interno y qué ingeniería aplicarán los clubes para realizar incorporaciones y moverse en un ambiente dolarizado.