Está claro que éste no es el año del equipo Ferrari. La escudería italiana no tuvo un gran presupuesto para invertir en el monoplaza y eso se ve en la pista. A todo esto, se le suma los inconvenientes de Sebastian Vettel a la hora de conducir el coche en el que no siente confianza” y no rinde como se espera.
Por este motivo, la tensión entre el tetracampeón mundial y la empresa italiana crece carrera tras carrera. Sobre esto se manifestó Mattia Binotto, jefe de la escudería, quien señaló que Cualquier cosa que podamos hacer para ayudar es importante para nosotros, para Sebastian.
Desde el punto de vista del equipo y del piloto, es importante para tratar de mejorar en las próximas carreras”. Por ello, los ingenieros mecánicos y el piloto alemán trabajarán durante toda la semana para estudiar porque el auto no responde como debería hacerlo. Una de las hipótesis que manejan es el cambio de chasis ya que la estabilidad es lo que hace difícil el manejo del monoplaza.
Cabe destacar, que el compañero de Vettel, Charles Leclerc, está pudiendo conducir correctamente el coche y actualmente se encuentra en la cuarta posición de los pilotos.
Sin espectadores
Tras reiteradas reuniones, los organizadores de las 24 horas de Le Mans, a disputarse el próximo 19 y 20 de septiembre, confirmaron que la carrera se disputará sin público. Lamentablemente, la carrera de resistencia más grande del mundo se disputará este año sin espectadores en la pista.
Dadas las limitaciones que implica la organización de un evento a escala de festival durante varios días en la situación actual, hemos optado con las autoridades del gobierno local para realizar la carrera a puerta cerrada”, informaron los dirigentes de la carrera.