Arde la interna en la Liga Profesional luego de la fecha de los clásicos, la anterior al arribo del VAR en el fútbol argentino. Es que ayer la Justicia dio lugar a la medida cautelar presentada por Marcelo Tinelli y frenó las elecciones, pautadas para el 8 de abril. Esto significa que el conductor televisivo acaba de poner en jaque la asunción de Cristian Malaspina, así como también todo el proceso democrático.
Lo que manifiesta Tinelli es que ningún candidato presentó la documentación respaldatoria y exigida por la Reglamentación para ser su sucesor en la Liga Profesional. “No fue otra cosa que un golpe institucional”, aseguró el dirigente de San Lorenzo a través de una carta que les envió a los clubes de Primera División y a la Asociación del Fútbol Argentino en relación a lo que sucedió a fines de 2021, cuando se pidió su salida de la presidencia.
Uno de los apuntados por Tinelli es Hernán Arboleya, dirigente de Lanús: en el anterior mandato fue vicepresidente y ahora es vocal suplente. “El Reglamento General de la LPF no permite que miembros no titulares de una Comisión Directiva de un Club formen parte de la Mesa Directiva de la Liga Profesional”, detalla Tinelli en su escrito.
Un legítimo reclamo amparado por el propio Reglamento de la Liga Profesional: “Los integrantes de la Mesa Directiva ostentarán su cargo mientras sean integrantes de la Comisión Directiva de uno de los CLUBES por el cual fueron elegidos”.
La lista de Cristian Malaspina, dirigente de Argentinos Juniors, fue la única que se presentó en la Comisión Electoral de AFA: por eso, será el nuevo mandatario de la entidad. Otros de los protagonistas de esta historia fue Mario Leito, histórico dirigente de Atlético Tucumán, quien se había posicionado como otro de los candidatos en las últimas semanas: buscó avales hasta el final y no los consiguió. Finalmente, decidió no presentarte para las elecciones, lo que le allanó el camino a Malaspina.