La Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (Amcham) advirtió ayer que el congelamiento de precios es una bomba de tiempo” que puede estallar en cualquier momento.
La entidad que agrupa a empresas como Coca-Cola, Pepsi, Johnson & Johnson y Walmart cuestionó la medida y alertó sobre la aplicación de recetas artificiales para el control de la escalada inflacionaria”.
El hilo siempre se corta por lo más delgado, las damnificadas volverán a ser las más de 185.000 pymes, para quienes el daño en la aplicación de la resolución, puede ser su supervivencia o el cierre definitivo”, advirtió.
A la vez, recomendó a las autoridades continuar el diálogo con el sector empresarial en la búsqueda de soluciones consensuadas y aplicando políticas públicas realmente eficientes para combatir este flagelo”.
Luego opinó que el control vigente de precios no es una medida que colabore a luchar contra la inflación. Al respecto, señaló que la experiencia de la Argentina y mundial es muy elocuente en cuanto a que los congelamientos de precios no resuelven este problema, muy por el contrario, lo transforma en una bomba de tiempo que tarde o temprano hará eclosión”.
Sólo se logra reprimir precios durante un periodo y luego vuelven a sus niveles de equilibrio. Con este congelamiento lo que se va a generar es que el arrastre futuro sea de un mayor nivel de precios cuando la medida termine”, indicó Amcham.
A su entender, la resolución 1050/21 de Comercio Interior que fijó precios de 1.500 productos hasta el 7 de enero de 2022, no logra resolver los desequilibrios macroeconómicos que dan origen a la inflación”. Por último, el comunicado exige para combatir el flagelo” de la inflación un plan de estabilización que dé señales claras sobre la política monetaria y fiscal.
Empresas aceptan retrotraer los valores
En el contexto de fuertes críticas que recibió la secretaría de Comercio Interior por la implementación unilateral del programa de congelamiento de una canasta de más de 1400 productos durante 90 días, el dato novedoso de la jornada de ayer fue que las empresas fabricantes que se mostraban más duras en la negociación con el Gobierno en las últimas horas empezaron a mandar nuevas listas con los precios retroactivos al 1° de octubre, cumpliendo así con el pedido del titular del área, Roberto Feletti.
Según los supermercados, las empresas que se habían mostrado más intransigentes -en el Gobierno precisaban que se trataba de Arcor, Molinos Río de la Plata y Ledesma- empezaron a enviar a sus clientes nuevas listas con los precios retroactivos al 1° de octubre.
Este punto era uno de los principales obstáculos en la negociación entre las empresas y el Gobierno, porque las primeras buscaban que quedaran firmes los aumentos que les había otorgado oficialmente y por escrito la anterior secretaria de Comercio, Paula Español.