Un estudio de la Bolsa de Comercio de Córdoba resaltó la necesidad de aumentar las importaciones de insumos para incrementar las ventas al resto del mundo y, de esta manera, reducir la escasez de divisas en la economía.
El informe se dio a conocer el martes pasado, es decir, un día después de que la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, advirtiera en un acto por el Día de la Bandera realizado por la CTA en la ciudad bonaerense de Avellaneda, que en el país hay un “festival de importaciones” y apuntó contra el Banco Central, la Afip y el Ministerio de Producción. En su discurso, apuntó contra la evasión fiscal y la fuga de dólares, a la vez que recalcó que hay muy poco monitoreo sobre lo que hacen las empresas.
En ese contexto, el estudio elaborado por los economistas Fabio Ventre y Manuela Rossi, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Bolsa, aseguró que para poder cumplir con el Plan Argentina Productiva 2030 que incluye 10 metas, entre las que se destaca la propuesta de duplicar las exportaciones hasta los U$S 174.000 millones en ocho años, es condición necesaria aumentar de forma drástica las importaciones. Y no al revés.
El trabajo señaló que Argentina tiene una de las economías más cerradas del mundo, con una apertura comercial, medida como las importaciones y exportaciones respecto al Producto Bruto Interno (PBI), de sólo el 33,4% (en 2021). En la región, el ratio fue de 49% en 2020 y, en el mundo, del 52,1%.
“Lo cierto es que para incrementar las ventas hacia el resto del mundo y cumplir con este objetivo [del Plan Argentina Produce], el país necesita aumentar las importaciones de insumos requeridos para la producción de bienes y servicios”, sostuvo el IIE. Y agregó: “Cada dólar exportado por Argentina cuenta con 11 centavos de contenido importado. Entonces, para duplicar las exportaciones habría que incrementar las importaciones al menos US$ 10.000 millones”. Esto se explica por las llamadas “cadenas globales de valor”.
El comercio internacional incentiva a que los países se especialicen en determinados eslabones, por lo que las exportaciones –y también los productos producidos y consumidos en el mercado interno– requieren de importaciones. Por ejemplo, buena parte de los autos que se fabrican en Argentina y luego se exportan, se nutran de piezas importadas. Sin esas compras al exterior, no se pueden fabricar los vehículos para luego exportarlos y que entren divisas.
La importancia de las importaciones
“Mientras que 11% de lo exportado por Argentina tiene contenido importado, 5% de lo producido para consumo local requiere de insumos que provienen del resto del mundo. De este análisis se desprende que las importaciones son el doble de significativas para exportar que para producir para consumo doméstico”, indicó el estudio.
Los cálculos del IIE están basados en la información para la Argentina de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde).
Sectores como los de la industria química o de la electrónica, por caso, requieren una alta proporción de insumos importados para producir: 27% y 43% en relación al valor bruto de la producción, respectivamente. Un porcentaje alto de las importaciones de estos mismos sectores es destinado a productos de exportación. Como explicamos antes, esto también ocurre con la industria automotriz y las ramas industriales ligadas al caucho y plástico, entre otros.
Argentina: importaciones versus exportaciones
A su vez, en Argentina, el 8,5% de lo producido es enviado al resto del mundo. Esto se conoce como “propensión a exportar”. En base a este indicador, dice el IIE, en el país hay 12 sectores con un potencial exportador superior al promedio: entre ellos se cuentan el automotriz, los servicios IT (software y programación) y la agroindustria.
El informe resaltó a la agroindustria como uno de los sectores más competitivos de la economía argentina y menos demandantes de importaciones (equivalen a 0,6% de lo que produce), pero sus exportaciones llevan 7,4% de contenido importado. Para las exportaciones agroindustriales, en tanto, resulta 13 veces más importante contar con importaciones para exportar que para producir localmente.
“En función del mapa exportador argentino, es esperable que –de alcanzarse el objetivo propuesto por el Gobierno– la mayor parte de las exportaciones sean generadas por la docena de sectores con más potencial. En ese supuesto, se requerirían aún más divisas para las importaciones que los U$S 10.000 millones estimados de base”, finalizó el estudio.