Las flatulencias, gases, ventocidades o, simplemente, pedos son el resultado del aire que ingresa al tracto digestivo cuando tragamos y alimentos sin digerir que las bacterias descomponen en nuestros intestinos.
Habitualmente, una persona expulsa entre 12 y 14 flatulencias al día. Esto es, cerca de medio litro de gas.
Su composición es de 59% nitrógeno, 21% hidrógeno, 9% dióxido de carbono, 7% metano, 3% oxígeno y 1% azufre.
Es su alta composición de nitrógeno y metano lo que los hace inflamables. Mientras que el azufre es lo que les da su olor característico. Comer queso, repollo o huevos potencia esta última característica.
La velocidad de expulsión de una flatulencia es de tres metros por segundo y su aroma puede olerse entre 10 y 15 segundos.
Su sonido se debe a la presión que ejercen los músculos del esfínter al expulsar los gases a través del ano.
Una persona muerta puede soltar pedos hasta tres horas después de morir, tanto por el ano como por la boca.
Fuente: @la_ciencia_dice (Instagram)