Fernando Calviño, profesor de yoga y meditación, puede sostener hasta 75 kilos con sus testículos. Aunque a la mayoría de las personas nos parezca algo doloroso, el hombre dice que la fuerza está en la cabeza y en saber usar “los huevos”.
Fernando Calviño nació en Buenos Aires en 1956 y desde muy joven asegura que sintió una conexión con la cultura hindú. Comenzó con la práctica hace muchos años y esto lo llevo a hacer alrededor de 15 viajes de estudio a la India.
Durante ellos, practicó distintos estilos de yoga con los instructores más conocidos del mundo hasta llegar a ser profesor de yoga. Además, es muy conocido porque fue el primero en instalar el sistema Iyengar a la Argentina.
El hombre también se formó en el conocimiento corporal, base fundamental para llevar adelante la hazaña que lo catapultó a la fama en las redes. Xi Sui Ying es el nombre de la práctica que consiste en cargar peso sobre los genitales.
En esta maniobra, que realizan los chinos desde hace más de 100 años, se busca reactivar la médula de los huesos y nutrir las células del cerebro.
Para poder lograr esto, se masajea la zona por unos segundos y luego se carga peso en los testículos y se busca dar equilibrio con suaves balanceos.
Si bien parece algo extraño y doloroso, es algo 100% real. Según la creencia budista, esta técnica alarga la vida y mejora la calidad de la salud.
Se llegó a esta conclusión porque se investigó que los genitales son una fuente poderosa de energía. Entonces, si se puede aumentar la producción hormonal, el organismo del individuo será más longevo.
Es común que en oriente se practiquen estos movimientos desde muy temprana edad y que este conocimiento se transmita de generación en generación.
Para lograr la práctica con éxito, el yogui ata a las pesas una cinta de seda, envuelve cuidadosamente sus testículos y levanta el peso.
Parece sumamente difícil, pero para este hombre la respuesta no está en la fuerza sino en la cabeza. Si la mente aguanta “el dolor”, no hay nada que pare el ejercicio.
El hecho de que él sostenga esa cantidad de kilos es consecuencia de la práctica, el estudio, la dedicación y la meditación.