El cantante de cumbia 420, Elián Ángel Valenzuela, conocido como L-Gante, negó hoy las acusaciones en su contra y dio una «explicación detallada» al ser indagado durante más de dos horas ante el fiscal de la causa en la que está detenido como imputado de amenazar y privar ilegal de la libertad de dos personas en mayo pasado, tras una pelea a la salida de un boliche de la localidad bonaerense de General Rodríguez.
«Dio una explicación detallada. Explicó todo. Dio detalles y aportó pruebas de video», indicó esta tarde a la prensa el abogado defensor Alejandro Cipolla, quien añadió que L-Gante seguirá alojado, por el momento, en una celda de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, aunque tiene previsto pedir la excarcelación y también un cambio de carátula.
Fuentes judiciales informaron que Valenzuela fue indagado por tres hechos: «privación ilegítima de la libertad, en concurso ideal con amenazas coactiva agravadas por el uso de armas y por perpetuarse contra un miembro del poder público»; «privación ilegítima de la libertad en concurso ideal con amenazas coactivas agravadas por el uso de arma»; y «tenencia simple de estupefacientes en carácter de autor».
De este modo, la condena al cantante se amplió hasta unos posibles 25 años de prisión.
Los mismos voceros señalaron que el imputado brindó su versión de los ocurrido y se negó a contestar preguntas del fiscal Raúl Villalba, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 9 de Moreno-General Rodríguez, quien dispuso que se le realice una revisión médica y sea derivado a su lugar de detención.
En tanto, Cipolla dijo, a la salida de la sede judicial, que L-Gante sí respondió a sus preguntas y explicó que los hechos fueron consecuencia de «unos problemas que hubo en la puerta de su casa», en los que se produjeron «disparos, de no se sabe quién» y que todo transcurrió «antes» de que el músico llegara al lugar.
Sobre la privación ilegal de las dos personas que lo denunciaron, el letrado consideró que «es imposible», dado que ambos «se subieron solos» al auto de L-Gante porque «eran conocidos», y que luego «nadie llamó al 911» para alertar sobre esa supuesta situación.
El letrado añadió que pedirán una nueva declaración de uno de los denunciantes ante la posibilidad de que en la primera exposición haya estado «coaccionado», al tiempo que planteará ante la Justicia de Garantías, en forma subsidiaria a la excarcelación, la posibilidad de que le otorguen un arresto domiciliario.
«Lo encontré bien. Me pidió elementos para poder seguir haciendo música y pudo ver a su familia», agregó el defensor.
L-Gante fue trasladado a la fiscalía pasadas las 5 de la madrugada del jueves desde la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, donde pasó dos noches detenido.
El traslado se realizó en el marco de un amplio operativo de seguridad que incluyó decenas de policías y un vallado rodeó la sede fiscal donde finalmente se llevó a cabo la indagatoria.
Por su parte, Claudia Valenzuela, la madre del músico, afirmó que la detención de su hijo es «un tema de dinero y política», que «si no fuese tan famoso, no estaría preso» y que el denunciante «le clavó un puñal por la espalda».
«Es una vergüenza que la persona que más de una vez le diste de comer con una mano, con la otra mano te esté clavando un puñal. El denunciante es el papá de amigos de Elián. Amigos de antes, de la vida», expresó esta mañana ante la prensa, antes de producirse la declaración en la fiscalía.
La denuncia que derivó en el arresto del cantante fue realizada el 27 de mayo último por Gastón Torres, vecino de la familia de Valenzuela, que reside en el barrio Bicentenario de General Rodríguez, en el oeste del conurbano.
Según las fuentes, la mañana de ese día, a la salida del local bailable «Río» ubicado en esa localidad, hubo un incidente con varios jóvenes integrantes de la denominada «La Mafilia», el grupo de amigos y músicos al que pertenece L-Gante.
Cuando Torres se retira del boliche para dirigirse a su casa, comenzó a recibir amenazas por parte de Valenzuela: «Te metiste con La Mafilia, te metiste con la 420, ya vas a ver lo que te va a pasar», le dice, según contó ayer el abogado del denunciante, Leonardo Sigal.
Tras ello, siempre según la denuncia, integrantes de ese mismo grupo fueron hasta su casa y lo agredieron físicamente tanto a él como a su familia y luego pasó un BMW blanco conducido por Valenzuela, que bajó el vidrio, le apuntó con un arma y subió al auto a Torres.
A los pocos metros, también fue interceptada y obligada a subir al mismo rodado una joven, vecina del músico, que había participado de la primera discusión con los amigos de L-Gante, según la denuncia.
Luego y siempre según los dichos del abogado denunciante, algunos integrantes de «La Mafilia» fueron demorados por la policía y L-Gante regresó hacia donde estaba el móvil, bajó el vidrio y les dijo a los agentes: ‘Largame a los pibes o a éste te lo mato'», en referencia a la víctima que estaba retenida dentro de su BMW).
En ese momento, de acuerdo a la denuncia, el cantante de la cumbia 420 llamó a otra persona al que identifica con un apodo y le dice: «Preparame el campito que a este perejil lo matamos ahí».
Torres permaneció 23 minutos cautivo, hasta que L-Gante recibió una llamada en la que le aseguraban que sus amigos habían sido liberados por la policía y liberó a las víctimas.
Un investigador aseguró que la denuncia fue corroborada luego por decenas de cámaras de seguridad, por la geolocalización de los teléfonos celulares y por la declaración de los policías, otros testigos y familiares de las víctimas.
Con la prueba reunida, la fiscalía solicitó la detención de Valenzuela ante el Juzgado de Garantías 2, a cargo del juez Gabriel Castro, quien convalidó el pedido y dispuso cuatro allanamientos el martes pasado, uno de ellos en el sector 1 del country del Club Banco Provincia, donde finalmente el músico fue detenido.
En los procedimientos se secuestraron el auto BMW, tres réplicas de armas de fuego y el teléfono celular del imputado.