La epidemia fue el tema central de una inédita Cumbre Iberoamericana semipresencial que se desarrolló en Andorra, en la que la mayoría de los mandatarios latinoamericanos participaron de forma remota. Al reiterado reclamo de mayor y mejor distribución de vacunas y de un financiamiento futuro acorde a las necesidades de la región, se sumó como uno de los puntos centrales el anuncio de España de que donará 7,5 millones de dosis a países de Latinoamérica.
Antes de los discursos, la Secretaría General Iberoamericana, Rebeca Grynspan, afirmó que la región solo podrá salir de la crisis con apoyo internacional, a través de acceso a vacunas, a través de instrumentos de financiamiento de deudas, a través de más inversión”.
Casi en cascada, los discursos de los mandatarios repitieron los mismos reclamos: mayor acceso a las vacunas, financiamiento, ayuda crediticia y, en menor medida, apoyos al multilateralismo. Al fin, Gryspan hizo un llamado al acceso universal a la vacunación como un bien público global” y a fortalecer” Covax, el fondo de la ONU para suministrar vacunas a países de bajos y medianos ingresos.