El fundador y CEO de la automotriz Tesla, Elon Musk, está siendo investigado por las autoridades estadounidenses por su conducta en su intento de compra de la red social Twitter.
La investigación se divulgó luego de que los abogados de Twitter pidieran en un escrito a una corte de Delaware que necesitaban documentos vinculados con la misma, según la agencia de noticias Bloomberg.
En concreto, los representantes de Twitter buscan conocer qué les dijo Musk a las autoridades federales en el marco de la investigación y acceder a los documentos vinculados con ella.
«Ha intercambiado correspondencia sustantiva con esas autoridades en relación con sus investigaciones. Twitter quiere esos documentos, porque tienen que ver con cuestiones claves en este litigio», aseguraron los abogados.
Según Bloomberg, Twitter viene solicitando información respecto de las comunicaciones de Musk con las autoridades desde julio, pero los abogados del magnate intentaron limitar el acceso a estos archivos, citando normativas de confidencialidad.
“Este juego de ocultar la pelota se tiene que terminar”, enfatizaron los representantes de la red social.
En tanto, según señaló Alex Spiro, abogado de Musk, “en realidad son los ejecutivos de Twitter quienes están bajo investigación”, sin brindar mayores detalles sobre la misma. Por su parte, fuentes de la empresa negaron que exista tal investigación.
Una de las autoridades que investiga a Musk es la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), la cual cuestionó, entre otros puntos, que Musk haya hecho pública su participación previa a la compra en la firma (del 9,2%) una semana después de cuando debía haberlo hecho según las regulaciones en la materia.
Musk realizó el trámite ante la SEC el 4 de abril cuando debía haberlo hecho el 24 de marzo, semana en la cual comenzó a criticar abiertamente a Twitter en su cuenta en la red social.
Por el mismo asunto, Musk también está siendo investigado por la Comisión Federal de Comercio (FTC), ente que también está realizando un análisis antimonopolio de la adquisición.
El CEO de SpaceX comenzó a comprar acciones de Twitter a fines de enero, acumulando lentamente participación en la empresa hasta que finalmente realizó una oferta de compra por toda la compañía el 14 de abril.
El 8 de julio, luego de diversas amenazas, Musk retiró su oferta bajo el argumento de que la empresa lo había engañado sobre el tamaño de su base de usuario al contar en el número a cuentas automatizadas conocidas como bots.
Como respuesta, Twitter lo demandó en la justicia para obligarlo a seguir adelante con la compra. Para evitar el juicio, Musk volvió a ofrecer a principios de mes US$ 44.000 millones por la empresa.
La jueza Kathaleen St. J. McCormick se alineó repetidamente con Twitter en los fallos previos al juicio, según una persona familiarizada, y existía la preocupación de que el lado de Musk no pudiera demostrar un efecto adverso material.
McCormick señaló que está preparada para que el juicio comience en noviembre, si para el 28 de octubre ambas partes no llegan a un acuerdo.