El Gobierno creó la Agencia de Deporte Nacional en reemplazo de la Secretaría de Deportes a través de un Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU) que utilizó el presidente Mauricio Macri en acuerdo general de Ministros.
La Agencia será un «organismo descentralizado y autárquico en el ámbito de la Secretaría General de la Presidencia de la Nación» y tendrá a su cargo «el diseño, coordinación y ejecución general de las políticas públicas en materia deportiva». Según se informó en el Boletín Oficial, el organismo «posee plena capacidad jurídica para actuar en los ámbitos del derecho público y privado y su patrimonio estará constituido por los bienes que se le transfieran en asignación y los que adquiera en el futuro por cualquier título a nombre del Estado Nacional».
La conducción y administración de la Agencia estará a cargo de un Director Ejecutivo y uno Subdirector Ejecutivo mientras que habrá un representante designado por el Comité Olímpico Argentino, uno nombrado por el Comité Paralímpico Argentino, un representante de la Comisión de Deportes de la Honorable Cámara de Diputados y uno de la de Senadores».
En tanto, los recursos operativos de la Agencia son, entre otros: «Partidas presupuestarias asignadas por la Ley de Presupuesto o Leyes especiales, los aportes extraordinarios del Estado Nacional, ingresos directos provenientes de recaudaciones que se obtengan por las actividades que se realicen en sus instalaciones y las ventas, locaciones u otras formas de contratación de sus bienes muebles y servicios».
Además los ingresos directos provenientes de: «El producido total o parcial de la organización de concursos, actividades deportivas y otros eventos análogos, conforme a la modalidad en que hayan sido convenidos y los fondos provenientes de la explotación de bienes muebles y de los servicios arancelados».
También «recursos obtenidos, por la celebración por parte de la Agencia de Administración de bienes del Estado, de contratos onerosos de concesión, permiso de uso, locación, derechos publicitarios y comercialización de espacios publicitarios de los bienes bajo su jurisdicción o custodia». La Agencia tendrá como uno de los objetivos «entender en la orientación, programación, promoción, coordinación, asistencia, ordenamiento y fiscalización de la actividad deportiva en todo el país en todas sus formas y modalidades».
Además deberá «entender en la asignación, administración y otorgamiento de becas, subsidios, subvenciones para el fomento de la actividad deportiva y en la elaboración de planes, programas y proyectos destinados al fomento y desarrollo del deporte y sus valores». En tanto, también entenderá «en la realización de juegos deportivos en el territorio de la Nación, incluyendo el Programa Social y Deportivo Juegos Nacionales Evita como así también en la promoción y fomento de juegos deportivos regionales e internacionales».
Críticas a la reforma que pasó por alto al Congreso
La inminente eliminación de la Secretaría había sido duramente cuestionada por algunos deportistas, lo que se suma a los reparos que muchos pusieron a la posible mudanza del Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard). «Una locura lo que pretenden hacer. Quieren vender todo lo que nos pertenece: los lugares para practicar deportes y el acceso de todos a las actividades deportivas. Tenemos que decirles que NO!», se plantó el ex voleibolista Marcos Milinkovic. También hubo un duro posicionamiento de «la Selección del 88», el histórico equipo de voley que logró una medalla en los juegos de Seúl.
El periodista Ernesto Rodríguez III que anticipó el decreto que se venía cuando circulaba como un proyecto por varios despachos oficiales, se hizo una pregunta clave: “¿Por qué no esperar hasta que el Congreso inicie sus sesiones ordinarias, el viernes 1º de marzo, y debatir como corresponde un ‘programa de gestión a 20 años’, como reza el proyecto en sus considerandos?”. Especialistas técnicos de la ahora ex secretaría de Deportes «especulan que la puesta en juego del AABE (Agencia de Administración de Bienes del Estado) tiene que ver con un plan inmobiliario que excedería las actuales posesiones de la secretaría porque AABE (una virtual inmobiliaria del Estado) puede disponer de inmuebles de otras reparticiones y brindárselas en comodato a otra entidad», dijo el periodista.
“Macri firmó el decreto para hacer negocios”, declaró Claudio Morresi, el secretario de Deporte que más tiempo ocupó el cargo desde la restauración democrática. Casi durante diez años. El diputado nacional del Frente para la Victoria e integrante de la Comisión de Deportes, Carlos Castagneto opinó: “Es una locura. Primero le sacaron la plata al Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Enard), ahora desaparecerá la Secretaría, quieren vender el Cenard que tiene instalaciones que son patrimonio nacional y además privatizar el deporte”.