El intendente Eduardo Romero logró ayer su reelección en la localidad de Villa Allende, donde se impuso con el 36,89% de los votos. El “Gato” celebró su triunfo junto a una serie de referentes de la coalición de Cambiemos, entre ellos el binomio de candidatos a la gobernación del espacio Córdoba Cambia, Mario Negri y Héctor Baldassi. Otro de los que se sumó al búnker oficialista, fue el jefe municipal de Marcos Juárez, Pedro Delarrossa.
Con el 100% de las mesas escrutadas, el radical Martín Ambort (Avancemos Villa Allende) se ubicó en segundo lugar, con el 26,99% de las adhesiones. Le siguió el peronista Héctor Colombo (Unión por Córdoba) con el 23,23% de los apoyos. A continuación, estuvieron Daniel Bellón (Movimiento de Acción Vecinal) con el 4,82%; Susana Rins (Frente de Izquierda y de los Trabajadores) con 3,05%; y Graciela López (Encuentro Vecinal) con 2,75%.
En la ocasión, Romero consideró que su reelección “demuestra que vamos por el buen camino, hemos hecho cosas buenas. Nos faltan otras por hacer pero tenemos una visión de futuro de lo que queremos”. De todos modos, reconoció que “algunas cosas no se hicieron o se retrasaron por la situación del país”. El ex golfista también resaltó que el presidente Mauricio Macri lo llamó para felicitarlo. “Seguramente lo vaya a visitar mañana (por hoy) a la Casa de Gobierno en Buenos Aires”, anticipó el “Gato”.
Cabe mencionar que en horas de la tarde, Romero fue el protagonista de un incidente menor que tuvo lugar en la escuela donde emitió su voto. Ocurre que el reconocido ex golfista se tomó fotografías con simpatizantes y brindó notas a los medios de comunicación, aún dentro del establecimiento educativo. Un sector de la oposición interpretó esas actitudes como parte de la campaña electoral, y por lo tanto, lo consideró una contravención.
“Le pedí que se retirara del colegio atento a que no podía ser que haya una contravención tan grande, siendo un intendente con cuatro años en el ejercicio del poder. No puede ser que haya venido a hacer campaña dentro del colegio”, manifestó Sergio Pardó, apoderado de Avancemos Villa Allende, el partido que llevó como postulante a Ambort, ex intendente entre 1987 y 1993. “No puede ser que un candidato haga eso; está totalmente en contra de lo que dice la ley y en contra de la ética”, concluyó.
Otros resultados
En Pilar, Belis perdió y continuará preso
El candidato a intendente de la UCR, Leopoldo Grumstrup, se adjudicó ayer las elecciones en Pilar. El postulante radical celebró su triunfo junto al candidato a gobernador, Ramón Mestre. En esta localidad, la atención se había centrado en la candidatura de Diego Bechis, ex jefe municipal, quien se encuentra detenido hace más de un año por presuntos delitos en su gestión. El hecho de que esté preso no lo inhabilitó a postularse como candidato a intendente. Para ello, debería estar condenado con sentencia firme.
Nuevas intendentas
Una mujer conducirá por primera vez el municipio de Río Primero, luego de haber ganado ayer en una histórica elección en dicha localidad. Se trata de Cristina Cravero, quien accedió a la intendencia por el justicialismo. La dirigente derrotó al ex jefe municipal Guillermo Crucianelli que se presentó con la boleta de Cambiemos. En Inriville, Julieta Aquino, de Unión por Córdoba (UPC) ganó los comicios superando al actual intendente vecinalista Marcos Rodrigué. En Quilino, Mabel Godoy, también del peronismo, le arrebató el municipio a la UCR. Y en Obispo Trejo ganó Silbia Mansilla, de UPC, que venció al radical Rubén Foletto (actual intendente). En tanto, en Estación Juárez Celman, la radical Miriam Prunotto logró retener el cargo; la misma suerte tuvo Gladys Espíndola, quien ganó en Pozo Nuevo y también por la UCR.