Autoridades de la iglesia católica argentina pidieron al Gobierno que disponga las medidas necesarias para declarar la emergencia alimentaria y nutricional todo el territorio nacional.
El reclamo llegó a través de la Comisión de Pastoral Social, que encabeza el obispo Jorge Lugones, en medio de la crisis económica que atraviesa el país y acentuada tras la derrota del Gobierno en las Paso. El pedido, según adelantó el matutino La Nación, se produjo tres días después de que el presidente Mauricio Macri recibiera en la Casa Rosada a la conducción del Episcopado, que preside el obispo Oscar Ojea.
«Ante el severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado del precio de los alimentos de la canasta básica, nos encontramos en una situación de emergencia alimentaria y nutricional, que afecta esencialmente a los más vulnerables, en especial a los pequeños», advirtió está mañana el equipo de la Pastoral Social.
En el encuentro con Ojea y el cardenal Poli, el Presidente le había pedido colaboración a la iglesia para ayudarlo a lograr la «cohesión social».
Más de 5 millones de argentinos no pueden acceder a una alimentación básica
“Más de 5 millones de argentinos no pueden acceder a una alimentación básica”, es la conclusión que arroja el último informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), realizado en base a datos del Indec, Ministerio de Trabajo, la UCA y la CAME. El documento dad a conocer hoy advierte que “entre 2016 y 2018 se duplicó la cantidad de argentinos que no pueden cubrir una alimentación básica”.
Entre los motivos principales que explican esta situación, se encuentra el incremento de precios de los alimentos básicos en los últimos 12 meses: “la leche aumentó un 88,7%; la manteca, un 88,3%; las salchichas, un 84%; los fideos, un 74%; el arroz, un 70,9%, y el pollo, un 70,3%”.
“La Universidad Católica Argentina (UCA) estima que mientras en 2015 el porcentaje de indigentes alcanzaba el 4,5%, en 2018 pasó a alcanzar el 6,1%. En el caso de los menores (0 a 17 años), el porcentaje pasó desde el 7,8% hasta el 10,9%, por lo que una de cada 10 niñas, niños y adolescentes no llegarían a cubrir siquiera un consumo alimentario básico”, expone el documento.
En el mismo sentido, apunta: “La tasa de indigencia pasó del 6,3% en el primer semestre de 2016 al 6,7% en el segundo semestre de 2018, lo que supone un aumento de más del 6%; mientras que en el Gran Buenos Aires la tasa subió del 6,2% al 7,3%, o sea un incremento de más del 17%”.
El informe agrega que “en el segundo semestre del 2018, la pobreza alcanzó al 32% de la población, un aumento de 6,3 puntos porcentuales en relación al mismo periodo del año anterior y significó que casi 2,7 millones de argentinos pasaran a tal condición en apenas 12 meses”.
En paralelo, en base a datos del INDEC y del Ministerio de Trabajo, el documento de la UNDAV indica que “entre julio de 2018 y julio de 2019, los alimentos y bebidas aumentaron casi el doble que lo que aumentó el salario mínimo”.