Hoy se llevará a cabo el segundo paro docente desde el inicio del ciclo lectivo en la provincia, en rechazo a la oferta paritaria que realizó el Gobierno de Córdoba a la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC). Además, habrá movilizaciones en distintas ciudades y localidades de la provincia, de las cuales la principal se llevará a cabo desde las 10.30 en nuestra ciudad.
Fue la asamblea de delegados departamentales del gremio la que resolvió el lunes rechazar la oferta de un aumento del 40% en cuatro tramos mensuales y acordó llevar adelante un plan de acción que, entre otras cosas, impulsó la adhesión al paro internacional de mujeres del “8M” y el paro por 24 horas con movilización a realizarse hoy en toda la provincia. Asimismo, los docentes decidieron llevar a cabo una nueva asamblea de delegados departamentales para analizar las medidas a seguir el próximo martes 14 y, de existir una nueva propuesta salarial superadora por parte de la Provincia, iniciar el proceso de información, consulta y resolución.
Una estrategia similar llevan adelante los equipos de salud, otro de los sectores más masivos de la administración pública con la mayoría de sus trabajadores con salarios por debajo de la línea de pobreza. Al respecto, la Coordinadora Córdoba Salud Unida (CSU), ratificó el paro con movilización y asistencia a los lugares de trabajo para el miércoles de la semana próxima si no hay una mejora en la oferta de aumento salarial.
Ayer, la coordinadora se reunió con la ministra de Salud de la Provincia, Gabriela Barbás, para abordar la temática de la modificación de la ley de Salud. No obstante, según indicó Pablo Igarzábal de CSU a Cba24n no se discutió la cuestión referida a la oferta salarial, idéntica a la que recibieron los docentes.
La estrategia de ambos gremios, que representan a una gran cantidad de agentes estatales con salarios por debajo de la línea de pobreza, difiere de la postura de Luz y Fuerza, el gremio de los empleados de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec). En este caso, la negociación contempla la aplicación de una cláusula gatillo de actualización salarial mensual automática para el período comprendido entre febrero de este año y junio próximo.
La diferencia radica, entre otras cuestiones, en el poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores de Epec que, durante los últimos años, mantuvieron una relación más pareja con la suba de los precios y se sostienen por encima del costo de la Canasta Básica Total familiar.