Los docentes e investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) completaron ayer la protesta convocada en reclamo de una recomposición salarial y la reapertura de la paritaria local, entre otras reivindicaciones, con una manifestación por el centro de nuestra ciudad, tras el paro del martes pasado que tuvo un fuerte acatamiento.
En consonancia con las jornadas de protestas convocadas por el Frente de Asociaciones de Base (FAB), que es una línea interna de la federación nacional Conadu, la Asociación de Docentes e Investigadores Universitarias de Córdoba (Adiuc) lanzó diferentes medidas para visibilizar la situación de precariedad que atraviesan las y los docentes universitarios, así como también los preuniversitarios.
Por un lado, el martes convocaron a una huelga general que tuvo un alto acatamiento en la mayoría de las facultades de la institución, con una manifestación ante el Consejo Superior de la UNC, al que presentaron un petitorio reclamando la “convocatoria urgente a la paritaria local”, que lleva suspendida desde octubre del año pasado.
Si bien los aumentos salariales se definen en la Nación, el órgano de paritaria local sirve para discutir con las autoridades de la Casa de Trejo numerosos reclamos que tienen que ver con las condiciones de trabajo de las y los trabajadores de la casa de altos estudios.
En la víspera, la protesta se completó con una concentración por la mañana en la ex plaza Vélez Sarsfield –sin paro-, donde docentes e investigadores realizaron una “mateada popular” y expusieron ante la comunidad las condiciones en que están trabajando, reclamando “un salario por encima de la inflación”. “La escalada inflacionaria registrada en el primer cuatrimestre desbordó las proyecciones que sirvieron de base al acuerdo paritario vigente.
Por eso, exigimos el urgente adelantamiento de las cuotas y la revisión del acuerdo 2022 para actualizar nuestros salarios, garantizando un incremento que supere los índices de inflación y nos permita avanzar en el camino de una recomposición salarial”, dijo el gremio. En marzo, los docentes habían cerrado una suba anual del 41%, pero la inflación de los últimos meses –que se ubicó por encima del 20%- desbordó rápidamente el acuerdo, por lo que los salarios están volviendo a perder con el alza de precios.