General Mills, una de las empresas alimenticias más importantes del mundo y dueña de la marca La Salteña, calificó a la Argentina como una economía “hiperinflacionaria”. La compañía estadounidense se suma así a una larga lista de multinacionales que advierten a los inversores en sus balances por la situación del país.
La firma norteamericana elaboró un documento en el cual manifiesta su descontento con el gobierno del presidente Mauricio Macri: “Registramos una pérdida de tres millones de pesos relacionada con el impacto de la contabilidad hiperinflacionaria para nuestra subsidiaria en Argentina”. Sumado a esto, en las últimas horas, se reveló la posibilidad de que el gigante estadounidense negociaría con varias empresas locales la venta de la emblemática planta La Salteña, que fabrica tapas para empanadas y pastas frescas y secas en su planta de Burzaco, ubicada en la provincia de Buenos Aires.
Por su parte, la oficina de Recursos Humanos de la empresa argentina negó esta información y aseguró seguir formando parte de General Mills. Sin embargo, Ezequiel Barbeito, miembro de la comisión interna de La Salteña aseguró que la planta cuenta con “400 empleados en planta y 100 repositores en la calle”. A su vez, advirtió que se encuentran “a la espera de una confirmación y también preocupados por la continuidad de las fuentes laborales”. Finalmente, afirmó que los trabajadores “están preocupados por la situación económica, política y social del país”.