Que el modelo económico de Cambiemos no tiene ganadores es una falacia. Ganadores existen. No obstante, es raro enterarse efectivamente quiénes son puesto que permanecen ocultos. Otra verdad a medias. No ocultos. Más bien, protegidos por un velo mediático de impunidad. Además, que el sistema financiero sea uno de los grandes ganadores del actual gobierno nacional es tan ajeno a la sociedad como importante.
Sin embargo, conocer a los ganadores del modelo, permite comprender, por contraposición, quiénes son los perdedores. Porque la recesión económica, la caída de la actividad y del salario, la contracción de la producción y el cierre de pequeñas y medianas empresas no fueron un fruto ajeno a la política. Por el contrario, son el resultado de las decisiones económicas que tomó la administración del presidente Mauricio Macri.
Y esos resultados están a la vista y pueden ser chequeados en el Informe sobre Bancos que publicó en los últimos días el Banco Central de la República Argentina (BCRA). Los bancos ganaron 10.598 millones de pesos en noviembre pasado. La cifra equivale a un aumento de 83,8% respecto del mismo mes de 2017. En tanto, entre enero y noviembre de 2018, acumularon ganancias por 153.978 millones de pesos, lo cual implica un incremento, prácticamente, de 100% en relación al mismo período de 2017.
Los datos difundidos por el Central posicionan al sistema financiero como uno de los principales ganadores de la era Cambiemos. Dos factores explican sus ganancias: la devaluación del peso y el aumento de las tasas de interés. A estos dos elementos se les suman los dividendos obtenidos por la inversión en activos que se ajustan por inflación, que en 2018, llegó al 48%.
El documento del BCRA detalla las principales causas que potenciaron las ganancias de la banca: 52.500 millones de pesos por intereses (+88,4% interanual) y 5.995 millones de pesos por tenencia de activos dolarizados (+479% interanual). También registraron incrementos por las inversiones en Letras de Liquidez (Leliq). Estas letras de corto plazo se registran en el balance contable de la banca como títulos valores, rubro que anotó ingresos por 44.554 millones de pesos (+594,7% interanual). Con los pesos depositados por sus clientes, los bancos compran Leliq con tasas de interés muy elevadas. De esta manera, obtienen ganancias a corto plazo con un rendimiento anualizado de casi 60%. La intención del Central con estos instrumentos financieros es frenar la emisión monetaria, retirar pesos de la plaza y evitar que se vayan al dólar, lo cual implicaría una suba en la divisa.
Además, el grupo de bancos analizado por el Central supo aprovechar la inflación de 2018. De acuerdo al informe, los activos ajustados por CER (inflación) generaron ingresos por 11.431 millones de pesos (+823% interanual).
Es importante remarcar también el aumento de los cargos por incobrabilidad. Este rubro generó en noviembre pérdidas por 5.698 millones de pesos (+111,6% interanual). Las elevadas tasas de interés de los préstamos explican, en parte, el aumento de la incobrabilidad. A esto se le suman las dificultades de los individuos y empresas endeudadas para pagar sus créditos en el marco de un contexto inflacionario y de caída del consumo interno.