BRASILIA.- El presidente Jair Bolsonaro intentó elevar ayer su enfrentamiento con el mandatario francés, Emmanuel Macron, por los incendios en el Amazonas a un rango regional: tras reunirse con su par chileno Sebastián Piñera, volvió a exigir una “disculpa” del jefe de Estado galo por declaraciones suyas que considera un “atentado contra la soberanía” de Brasil en la crisis ambiental, como curiosa condición para aceptar los 20.000.000 de dólares que ofreció el G7 para ayudar a controlarla.
“Por el hecho de haberme llamado mentiroso y haber dicho dos veces que la soberanía sobre el Amazonas tiene que ser relativizada (…), solamente cuando (Macron) se retracte no habrá problema en volver a conversar” con los países de la Unión Europea (UE), dijo Bolsonaro a los periodistas reunidos en el palacio presidencial, secundado por el propio Piñera, de visita en Brasilia. La semana pasada, Macron acusó a Bolsonaro de “mentir” en la discusión del acuerdo del Mercosur con la UE por “no respetar sus compromisos climáticos”, y el lunes sugirió la posibilidad de conceder un “estatuto internacional” para la selva amazónica en caso de que “un Estado soberano tomase de manera concreta medidas claramente contrarias al interés de todo el planeta”.
Pero Bolsonaro extendió su desafío a otros países del viejo continente, que también cuestionaron su política ambiental, al asegurar que “hace poco dije que Alemania y en especial Francia están tratando de comprar nuestra soberanía en cuotas”. “Cuando ustedes miran el tamaño de Brasil, la octava economía del mundo, parece que 20.000.000 de dólares es nuestro precio. Brasil no tiene precio: 20.000.000 o 20.000 millones es lo mismo para nosotros”, agregó. Por su parte, Piñera consideró que la ayuda internacional para mitigar los incendios debe ser agradecida, en tanto se respete la soberanía de los países de la región: “Eso hay que reconocerlo siempre”, manifestó.
El encuentro entre ambos mandatarios buscó mostrar una suerte de unidad regional contra las críticas europeas a la política ambiental de Bolsonaro: de hecho, anunciaron una cumbre entre los líderes de los países amazónicos para analizar la situación de la mayor selva natural del mundo. Si bien la iniciativa había sido lanzada el domingo por el boliviano Evo Morales, Bolsonaro y Piñera la hicieron propia ayer al anunciar que se llevará adelante el 6 de septiembre en Leticia, Colombia, con la presencia de todos los mandatarios afectados excepto el venezolano Nicolás Maduro.
Lo cierto es que las consecuencias del incendio tienen rango regional, como comprobó ayer Uruguay, que amaneció con sus cielos completamente cubiertos por el humo del Amazonas, por lo que pidió precaución a la población ante las consecuencias que puede acarrear a la salud.
Arde en África el segundo pulmón del mundo
NUAKCHOT.- En plena agitación mundial por los incendios en la cuenca del Amazonas, una imagen satelital difundida por la Nasa y analizada por Weather Source reveló que en África Central había más incendios que en Brasil. Solo en Angola y el sur de la República Democrática del Congo (RDC) hay más de 10.000 fuegos activos, frente a los 2.127 del país sudamericano. Entre las regiones afectadas, se encuentra la selva tropical de la cuenca del Río Congo, la segunda selva más grande del planeta después del Amazonas, que absorbe grandes cantidades de dióxido de carbono, esencial para la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, según los expertos, no son fenómenos comparables: la mayor parte de los incendios en África responde a técnicas agrícolas ancestrales en actividades agrícolas y pastorales y estarían controlados.