El tribunal penal del Vaticano condenó ayer al ex “número tres” del Vaticano a cinco años y medio de prisión por fraude, en un caso relacionado con operaciones financieras de la Santa Sede.
Se trata del cardenal Angelo Becciu, de 75 años, quien fue juzgado junto a otras nueve personas. Es el funcionario de mayor rango de la Iglesia Católica en comparecer ante este tribunal, que imparte la justicia civil de la Ciudad-estado.
Becciu, ex asesor del papa Francisco, también fue multado con 8.000 euros. La fiscalía vaticana había solicitado una sentencia de siete años y tres meses de prisión contra el obispo, así como una multa de más de 10.000 euros.
“Respetamos el veredicto, pero ciertamente presentaremos una apelación”, dijo Fabio Vignone, abogado del obispo.
En el centro del caso está la compra, por 350.000.000 de euros, de un edificio de lujo en Londres entre 2014 y 2018, en el marco de las inversiones de la Santa Sede, que cuenta con un patrimonio inmobiliario considerable.
El cardenal Becciu, ex número dos de la Secretaría de Estado, principal órgano del Gobierno central de la Santa Sede, conserva su título, pero fue destituido de todas sus funciones en septiembre de 2020.