Se trata del Beijing Institute of Biological Products-República Popular China, que produce la vacuna Sinopharm que se aplica en Argentina desde el inicio del plan estratégico de vacunación.
En el marco de su gira por Rusia, China y Barbados, el mandatario participó hoy de la reunión en Beijing, acompañado por el canciller Santiago Cafiero y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, entre otros integrantes de su delegación.
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El Gobierno argentino «ha adquirido más de 30 millones de dosis de Sinopharm contra la Covid-19 en momentos críticos cuando había escasez de vacunas para fortalecer el Plan de Vacunación más grande de la historia de nuestro país», señalaron las fuentes.
En ese marco, agregaron que la Argentina y China «están en negociaciones para iniciar la producción local de la vacuna Sinopharm contra la Covid-19 que producirá el laboratorio Sinergium Biotech con una capacidad para ofrecer hasta un millón de dosis por semana».
En paralelo, Sinopharm y la Fundación Huésped «hicieron en conjunto ensayos de Fase III de la vacuna que permitió que la misma pueda ser autorizada por la Administración Nacional de Medicamentos en forma rápida».
Las fuentes indicaron que la empresa Sinopharm posee seis plantas de producción de vacunas de virus inactivado de nivel en China.
Además, ha establecido plantas de relleno y envasado de vacunas en Emiratos Unidos Árabes, Serbia y Marruecos, y está negociando lo mismo con Bangladesh, Hungría, Vietnam, Birmania, y Uganda.
Por último, expresaron que «en la actualidad la capacidad de producción anual es 7.000 millones de dosis y la cantidad acumulada de producción de vacunas ha alcanzado las 2.500 millones dosis», y añadieron que Sinopharm «ha sido aprobada para el uso y comercialización en 112 países y regiones en el mundo y además ha conseguido el certificado de GMP de la Unión Europea».
«La multilateralidad es el gran desafío», planteó Fernández
Más temprano, en su primera actividad oficial en Beijing, el jefe de Estado afirmó que la «multilateralidad es un gran desafío que tenemos como humanidad» al recibir en Beijing el título de Profesor Honoris Causa por parte de la universidad china Tsinghua, la más importante de ese país.
«Definitivamente, en este mundo globalizado, la multilateralidad es el gran secreto. Hemos puesto fin al mundo bipolar, y como países tratamos de relacionarnos buscando un mejor destino», sostuvo Fernández este viernes, quien recibió la distinción en forma virtual -por la pandemia-.
En el inicio de su visita a China de tres días, Fernández puso de relieve que la «multilateralidad es un gran desafío que tenemos como humanidad».
«Al papa Francisco -expresó- le gusta usar una frase que bien sirve para explicar lo que estoy diciendo: Es hora de construir puentes y derribar muros. Es hora de acercarse y eliminar aquello que nos distancia. Ese es el secreto de la multilateralidad».
«Yo, desde la Argentina -prosiguió-, como otros jefes de Estado del mundo, creemos que ese es el camino. Tenemos que trabajar para profundizarlo aún más».
En su alocución, Fernández señaló que «ningún país del mundo ha nacido para ser satélite de otra comunidad» sino que «todos debemos desarrollarnos con nuestras propias experiencias, pero cerca, de forma mancomunada con el resto de las naciones libres del mundo».
Acerca del vínculo bilateral, el Presidente destacó que Argentina y China «tienen relaciones diplomáticas ya desde hace medio siglo, y en los últimos años ese vínculo se ha profundizado mucho».
«Nuestra patria les abrió sus puertas, los recibió y los acogió con todo el afecto que ellos merecen. Y eso nos obliga a tener el mejor vínculo posible con China. En eso estamos trabajando y estamos decididos a hacerlo», remarcó.
Por eso, manifestó que espera «verlos pronto en la Argentina» ya que «van a ser recibidos con todo el afecto y respeto que merecen».
«Desde esa lógica -puntualizó-, nosotros estamos estrechando cada vez más los vínculos que, desde hace 50 años, la Argentina y China tienen. Y estamos convencidos de que eso es muy provechoso, para la Argentina, para China y para el mundo. Argentina tiene una comunidad china muy importante».
Más adelante, en otro tramo de su discurso, el jefe de Estado apuntó que espera que «estos tiempos de pandemia terminen y ya tenga la oportunidad de visitar la ya querida por mi Universidad de Tsinghua».
«De corazón, gracias por este reconocimiento. Las puertas de la Argentina están abiertas y todo lo que pueda hacer nuestro gobierno por profundizar lazos, vamos a hacerlo», les manifestó Fernández.
Por otra parte, el Presidente recordó: «Hace poco tiempo hemos celebrado los 200 años de vida de la Universidad de Buenos Aires y para nosotros esa es una causa de verdadero orgullo», al elogiar que ambas casas de estudios mantienen un estrecho vínculo académico.
«Una de las cosas que nos enorgullece es ser parte de una universidad que es una de las mejores del mundo. Y por lo tanto no puedo menos que celebrar que la UBA tenga un acuerdo con la querida Universidad de Tsinghua para trabajar juntos», ponderó.
«Estoy convencido -insistió- de que vivimos un tiempo singular de nuestra historia como mundo. El mundo nos exige día a día mayor capacitación, mejor educación, acceder más al conocimiento y desarrollar mejor la ciencia y la tecnología».
Fernández, en ese camino, consideró que, «en un mundo que se ha globalizado como el mundo en el que vivimos, definitivamente la relación que debe existir entre las fuentes de conocimiento que son las universidades es importantísimo».
«China es un país milenario con una cultura admirable, se ha ganado el respeto del mundo y al que todos vemos con atención», concluyó.