El presidente panameño, José Raúl Mulino, afirmó este domingo que el canal interoceánico «es de Panamá y lo seguirá siendo», en respuesta a la amenaza del presidente electo de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, de que exigirá su devolución si no se reducen las tarifas que cobra para su tránsito.
La vía que une al Atlántico y el Pacífico y por la que pasa cerca del 3 % del comercio mundial, es parte de la «historia de lucha y una conquista irreversible» de Panamá, afirmó el gobernante. El canal de Panamá fue construido por Estados Unidos, que lo inauguró en 1914 y lo administró hasta su traspaso al Estado panameño el 31 de diciembre de 1999, como quedó establecido en los Tratados firmados el 7 de septiembre de 1977 en Washington por los entonces presidentes de Panamá, Omar Torrijos y de los EE.UU., Jimmy Carter.
Trump, quien asumirá el próximo 20 de enero el Gobierno estadounidense, se quejó el fin de semana de las tarifas «exorbitantes» y el manejo del Canal de Panamá, y amenazó con exigir su «devolución» si no se respetan los principios «morales y legales». También criticó al expresidente Carter, quien «tontamente lo regaló (el canal) por un dólar, durante su mandato», y volvió a reclamar que China tiene injerencia en la administración de la vía acuática, de la que Estados Unidos es el principal usuario.
Mulino, quien asumió la Presidencia el pasado 1 de julio para el quinquenio 2024-2029, destacó que “desde que está en manos panameñas el canal creció, es administrado por profesionales idóneos, quienes con reglas claras se encargan de su funcionamiento, conservación y mantenimiento, asegurando su operación segura, continua, eficiente y rentable”.
Luego afirmó que “Las tarifas no son un capricho, se establecen de manera pública y en audiencia abierta, considerando las condiciones del mercado, la competencia internacional, los costos operativos y las necesidades de mantenimiento y modernización de la vía interoceánica”.
El canal de Panamá, que se enfrentó a una grave sequía que le obligó a restringir durante meses el paso de buques, entregó esta semana al fisco un aporte 2.470 millones de dólares correspondientes al año fiscal 2024.
Mulino también aseveró que “el canal de Panamá no tiene control directo o indirecto ni de China, ni de la Comunidad Europea ni de Estados Unidos o de cualquiera otra potencia”, a la vez que garantizó su uso “para el tránsito pacífico e ininterrumpido de naves de todas las naciones”,, como lo establece la Constitución.