El costo de los productos que integran la canasta básica alimentaria (CBA) subió 6,7% en abril, lo que determinó que una familia conformada por dos adultos y dos hijos menores necesitara percibir ingresos por $42.527 para no caer en la indigencia, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En tanto, el costo de la canasta básica total (CBT) marcó un incrementó de 6,2% en abril, con lo que una familia integrada tipo debió contar con ingresos por un monto total estimado en $95.260 para no caer debajo de la línea de la pobreza, añadió el organismo en su informe mensual.
Según el Indec, las variaciones interanuales de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica Total (CBT) se ubicaron en 59,4% y 51,3%, respectivamente.
La diferencia entre una canasta -conformada esencialmente por alimentos- y otra radica esencialmente en que las tarifas de los servicios públicos y el transporte tuvieron escasos aumentos.
En marzo pasado, el costo de la canasta básica alimentaria había subido 6,5% hasta un monto de $39.862, mientras que la canasta básica total registró un aumento de 7% hasta un monto total de $89.690.
La semana pasada, la Dirección General de Estadística y Censos del Gobierno porteño había informado que en abril una familia de cuatro miembros que habita en la Ciudad de Buenos Aires necesitó por lo menos $52.169,48 para no estar en condiciones de indigencia, $95.268,16 para no revestir en la pobreza y $147.135,81 para ser considerada de clase media.
De esa forma, los gastos de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) de CABA, que marcan el límite de la indigencia, tuvieron el mes pasado un aumento de 5,17%, que llegó a 59,06% en el acumulado de los últimos doce meses.
En tanto, en el caso de la Canasta Básica Total (CBT), que establece el tope de la pobreza, el incremento mensual fue de 5,31% y el interanual de 54,70%, mientras que la Canasta Total (CT), que en diferentes proporciones delimita al sector medio frágil, la clase media y los sectores acomodados, subió 5,30% en el mes y 56,73% en relación con marzo del año pasado.
Por otra parte, el organismo nacional informó también la semana pasada que el índice de precios al consumidor (IPC) registró en abril un avance de 6%, con una suba de 5,9% en Alimentos y bebidas no alcohólicas.
La suba de Alimentos y bebidas no alcohólicas fue la que tuvo en ese mes la mayor incidencia en todas las regiones. Dentro de esta división se destacó el aumento de Carnes y derivados; Pan y cereales; y Leche, productos lácteos y huevos.
En el otro extremo se ubicaron Frutas y Verduras, tubérculos y legumbres, que fueron los de menor incidencia, con caídas incluso en algunas regiones.
En el rubro Alimentos y Bebidas no alcohólicas del IPC del Indec las principales subas se dieron en Aceites y Pan y Cereales, con incrementos de entre 8% y 15% según la región, seguido por Carnes y derivados y Lácteos, con aumentos de entre 5% y 7%.
Estos segmentos “fueron los más afectados por la suba de precios internacionales de los principales commodities durante los últimos meses, debido a la sequía, pero también al conflicto bélico” entre Rusia y Ucrania, señalaron en esa oportunidad desde el Ministerio de Economía de la Nación.