El sueño de miles de fanáticas del Rey Sol volverá a hacerse realidad esta noche. Luis Miguel actuará luego de cuatro años de no pisar suelo argentino para realizar una gira. La última vez no ofreció una buena performance y de hecho a nivel general su carrera no venía bien.
El éxito de su biografía que fue lanzada con el formato de serie en Netflix le dio un nuevo empujón a su trabajo en todo el mundo. El mexicano presentará en el Orfeo Superdomo las canciones de “México por siempre”, además de algunos clásicos de su trayectoria.
Anoche un grupo de seguidoras esperó al cantante en el aeropuerto y luego lo siguió hasta el hotel Sheraton donde se aloja. Allí, tras la insistencia, su ídolo les cumplió el sueño y se bajó de una camioneta custodiada por guardias de seguridad para saludar a todos con gran simpatía y una notable sonrisa. Incluso, el club de fans Simplemente Luis Miguel pudo filmar su llegada y hasta darle una remera, que el Rey Sol se llevó entre sus pertenencias.
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Quienes hayan comprado la entrada deberán estar atentos ya que hubo un cambio de horario: en los tickets figura las 21:30 como el momento en que el Sol subirá al escenario, pero la organización adelantó media hora el inicio del show. No obstante, desde la organización de la sala recomienda ir con anticipación para canjear las entradas compradas por Internet en las boleterías que se encuentran debajo del puente de acceso al salón. Los dos elementos necesarios para realizar este trámite son la tarjeta titular y el DNI.
Se prevé que a las 20, comience el espectáculo del dúo telonero para calentar la noche. Los encargados de arrancar son el conjunto cordobés Dos Cabezas.
Luis Miguel viene desde Santiago de Chile en un vuelo privado y llegó a la medianoche y se dirigirá directamente al Hotel Sheraron donde se aloja cada vez que visita nuestra ciudad. De allí no se moverá hasta que llegue el momento de trasladarse al Orfeo. Este movimiento no será mucho antes del inicio del recital ya que desde el salón comentaron que no suele usar el camarín. Solo llega, se sube al escenario y canta.
En materia de pedido extravagantes, esta vez no hubo nada raro. Luismi pidió únicamente agua con electrolitos y agua destilada. También se habría puesto puntilloso con la logística del transporte.