La Copa del Mundo que estará en juego a partir del próximo 20 de noviembre en Qatar llegará mañana a la Argentina, en el marco de la gira que organiza la FIFA, y será presenta en un acto a desarrollarse desde las 13.00 en el predio de la AFA en Ezeiza.
Luego, el trofeo estará en exhibición para el público en el predio de La Rural, el miércoles 26 y el jueves 27 desde las 9.00 hasta las 20.00.
La Copa del Mundo sólo puede ser tocada y alzada por los campeones del mundo y los jefes de Estado de las 211 federaciones que integran la FIFA.
Esta será la quinta vez que el original estará en Argentina, uno de los pocos países que participó en todas las giras previas organizadas por la empresa Coca-Cola, socia comercial de FIFA, en la cuenta regresiva de los anteriores Mundiales.
La primera vez que llegó al país fue a Mar del Plata en 2006, camino al Mundial de Alemania, y en 2010, antes a Sudáfrica, pasó por Córdoba. Volvió a la «Feliz» en el prólogo de Brasil 2014 e inició un raid más extenso y federal en los preparativos de Rusia 2018. En aquella oportunidad, el trofeo estuvo en Berazategui, Ciudad de Buenos Aires, Rosario y Tucumán.
Por primera vez, la Copa del Mundo pasará por los 32 países que participarán del Mundial de Qatar y en total recorrerá 51 territorios. Para 2030, la FIFA pretende que pase por los 211 países miembros.
La Copa del Mundo llegará desde Brasil, donde fue presentada por el histórico excapitán Cafú, y previamente estuvo en México. Después de la Argentina, la gira continuará por Uruguay.
El camino del trofeo comenzó en mayo en Dubai y terminará en Doha unos días antes del inicio del Mundial.
El trofeo original está hecho de oro macizo y pesa 6,142 kilos y su diseño recrea dos figuras humanas que sostienen un globo terráqueo. La forma actual surgió en la edición de Alemania 1974 ya que previamente se entregaba el trofeo inspirado en un homenaje a Jules Rimet.
El reglamento de la Copa del Mundo indica que los ganadores del torneo reciben en la coronación el trofeo original pero luego es devuelto a la FIFA. Luego, la federación ganadora recibe una réplica, cubierta en oro, grabada con el año y el país anfitrión.